PRINCESAS ENCANTANDAS
“NO les leeré historias de príncipes encantados a mis hijos para que no crezcan tristes y con la esperanza perdida en ellos mismos”
Hace poco leí esta frase sin poder acordarme en donde pero me la quede, pues es maravillosa y cierta; aunque ya tarde para mi, ya les leí estas historias a mis hijos, no solo eso, se las conté, y como si fuera poco se las he recordado muchas veces mas en la vida. Sin embargo, confío, que ellos tendrán el suficiente carácter para extraer la parte mas conveniente según la situación de la vida por la que atraviesen. Lo malo de los príncipes y las princesas que se quedan en encantamiento permanente es que finalmente se choquen con la realidad con otras ideas y otras historias algunas veces menos encantadas.
De donde vienen esas historias? porque aparecen siempre cuando tienes que decirle a alguien que no se porte así o que mejor de porte de otra manera? esta es la teoría: Hay princesas y príncipes encantados para todas las épocas, situaciones y momentos según el gusto del consumidor. Encontramos siempre en la historia de la humanidad, algunas como las de la edad media en las cuales los caballeros andaban de pueblo en pueblo de región en región buscando damas en apuros para salvarlas, estos caballeros acorazados en metal aparecían de la nada y en un abrir y cerrar de hojas, (de espada) se baten a espada, o a palo limpio, con el malo, con el pérfido y rescatan a la damisela, el premio el pago? Tal vez la damisela misma? bueno... algunas veces también se pierde.
Luego puedes encontrar las princesas de los cuentos de hadas que duermen el sueño infinito esperando el príncipe, también encantado, que viene a rescatarlas del sueño del nunca jamas ya sin espadas sin palos, sin violencia, solo con el tierno beso, el beso no de dormir, sino de despertar.
También encuentras el otro salvador un poco mas violento el que saca a la niña y la abuelita del estomago del pérfido lobo. y todo porque la niña no obedeció a la madre: “no vayas por el camino del medio ve por el camino lateral, ve por el otro, pero si insistes en ir por el del medio caerás en la tripa del lobo feroz”, y lo peor: no solo tu, también la abuela. Todos pagan todos sufren. Traduciendo: una historia para enseñarte a hacer lo que debes o no debes hacer, una historia para indicarte como pensar como llegar a una conclusión, para no dejar que te pierdas en tus locas ideas, en tus equivocadas ideas, “Haz lo que te digo....así no te meterás en problemas así todo saldrá color de rosa.
No se sabe en verdad, cuanto hace que toda esta artimaña se creo en la literatura porque estas historias siempre empiezan de la misma manera: -“Hace muchos muchos años en un lugar muy muy remoto” Es decir son historias sin tiempo ni lugar, muchas veces son historias que de acuerdo al país donde se cuente se cambia el personaje malo para hacerlo mas creíble a los niños del lugar.
Los cuentos de hadas han sido escritos para enseñar a generaciones enteras como hacer o dejar de hacer algo por ejemplo para enseñar a las mujeres, y no a los hombres, a ser fieles como en “‘Las mil y una noches”. Para enseñar a las niñas a ser buenas y obedientes como en la pobre “Caperucita roja.” a las jóvenes a ser pacientes y pasivas: “ya llegara tu propio príncipe, solo siéntate, descansa y espera, ya llegara” como en “La bella durmiente.”
.A mi modo de ver esta es una manera cómoda hacerse de un marido o príncipe, princesa o esposa, caballero, damisela o galán. Si les permitimos a nuestras generaciones crecer pensando de esta manera no veo para que alguien sufre los años de escolaridad o universidad, para que aprender un oficio? para que luchar por una mejor posición en la vida o un lugar en donde tengan el valor de ser ellos mismos, si solo deben tener paciencia que ya llegara el príncipe azul, o la damisela en apuros. Solo seria necesario aprender el idioma para hacer que aparezca el cazador, príncipe o caballero andante que nos rescate y nos lleve a su palacio encantado lleno de riquezas en donde nada tenemos que sufrir no tenemos que probarnos a nosotros mismos solo esperar que todo nos será concedido.
Lo malo de estas historias no son las historias en si, lo que me parece difícil es creértelas al pie de la letra y confiar en la aparición del consabido salvador y no luchar por hacer de la vida un lugar pleno para vivir, o el mejor lugar para pensar. Si crecemos esperando el salvador de las historias, si crecemos pensando que ya llegara nuestro príncipe azul entonces para que estudiar para que aprender para que competir por una vida mejor, porque no esperar, hacer la señal apropiada de acuerdo a la época al momento y zas agarrar el primer salvador o caballero andante, que a aparezca; ofrecerse como premio y vivir de acuerdo al cuento de hadas, que mas nos guste o al menos esperar vivir como en el cuento de hadas. Habrá miles de hombres y mujeres que se tomaran en serio esta teoría y querrán convertirse ellos mismos en los salvadores que llegan a rescatar, entonces trabajaran duro para poder serlo y solo vivir pensando en como proteger y ayudar pero no a ser ayudados o protegidos. Los habrá y las habrá también que desde siempre solo saben hacer el llamado de auxilio para que otros aparezcan a salvarles a sacarles de los apuros en los cuales se viven involucrando siempre con la ilusión de encontrar el rescatador.
Por ejemplo las princesas que se quedan jugando a ser las salvadoras siempre están tristes, pues sus corazas de acero no son suficientes para los desengaños, siempre están buscando el premio pero su corazón y algunas veces su cuerpo y su alma no resisten tantos desengaños, siempre luchando por que otros hagan por ellas lo que ellas mismas no saben hacer, para su propio bien.
Los hombres que se quedaron jugando a ser los salvadores no están mejor que las mujeres con igual decisión, pues es fácil ver que si lo que buscas es salvar y no amar tu no crecerás, muy por el contrario siempre el caballero acorazado tendrá que batirse en duros duelos en los cuales su parte física y emocional sufrirá y su coraza no será suficiente para protegerlo de el mismo.
Lo malo de los cuentos de hadas no son ellos en verdad sino nosotros mismos y la manera como hacemos nuestras las batallas ajenas sin fijarnos en las propias. Los cuentos de hadas no son malos, lo malo es creer que ellos son una realidad que podemos hacer propia. Lo malo de los cuentos de Hadas es creer que somos las hadas del cuento. Leerlos esta bien pero no debemos repetir lo que allí pasa tampoco podemos esperar que pase lo que allí se relata. Si así fuere que aparezca el genio de la lampara ya mismo y me convierta en escritora.
patinaz
