Saturday 24 November 2012

El Regalo



Queridos: Eloisa, Eleonora, Lucilda  Eusebio, Emeregildo, Concepción y Pascual.
 -Ya sé lo que les voy a dejar- dijo nuestro padre,  “Una volqueta llena de mierda”. Silencio absoluto. Risas silenciosas de nervios y rabia. Mórbidos pensamientos.  Pero tu  Emeregildo, siempre el más  optimista dijiste a nuestro padre: "yo acepto, gracias”,  pues desocupo la mierda y vendo la volqueta”. Risas triunfales, maliciosas  fin de la reunión y pausa temporal del pleito. 


Y aquí es donde mi pensamiento me traslada, uno de nosotros muy optimista le vio un lado positivo a algo tan pesado de discernir,  pero el resto de nosotros no supimos que hacer con el regalo. Lo hemos cargando en nuestro equipaje de la vida?  ?Nos lo pusimos? Lo empacamos en papel dorado? O tal vez  no hemos hecho nada con el pegajoso y oloroso regalo, seguimos “untados?” “irritados?” furiosos? 

Esto paso ya hace muchos años cuando murió nuestra madre y nos enredamos en una lucha por defender los derechos, el respeto y el  amor. Cuando pedimos, mendigamos, peleamos y defendimos nuestros derechos o más bien el derecho de nuestra madre quien no lo gano en vida por no haber sido casada con nuestro padre, aunque hubiesen vivido y sufrido gran parte de sus  vidas juntos.  Aunque él no haya sido casado con mujer alguna hasta donde mis conocimientos llegan.  Es fácil entender, hoy, la respuesta de mi padre. Como pedirle a un hombre que nació y creció en un ambiente en donde los hombres son los dueños de las cosas y la vida de todos a su lado, a un hombre que creció sabiendo por generaciones  que él es el hombre de  la casa  él es el hombre que lleva el dinero a la casa entonces es el hombre que pone las condiciones.? Como quisimos nosotros pretender ponerle condiciones? Como quisimos cambiar tantos  años de cultura en favor del lado masculino? Toda una vida de cultura machista?  Esta pretensión solo nos llevo a un resultado:  todo esto se confundió se enredo todos jalamos los retazos de amor, y nos quedamos solo con los derechos destrozados y los deberes intactos.


Al final el enredo fue tal que solo terminamos con el alma en muletas y la espalda cargada de culpas propias y prestadas, que, ningún triunfo alivia. Peleas discusiones y batallas sumadas a todo lo que trae defender tus derechos en familia. Después de este largo periodo en el cual nunca hubo ganadores sino vencidos, después de esta batalla de muertes de amor, finalmente esta fue la única respuesta y el único bien, no sé si mueble o inmueble que obtuvimos en vida de mi padre. 


Hoy recuerdo una de esas historias que pasan de boca en boca y que al final se convierten en una enseñanza; cuentos normales, para gentes formales: (dice el poeta)
- Este era un hombre que tenía dos hijos uno muy optimista y otro muy pesimista, llegado el día de Navidad el hombre pensó en darles una lección a sus hijos: o mejor, o tal vez, darse el mismo una lección. Le dio al pesimista un hermoso y muy costoso caballo de raza con pedigrí. Y al optimista le puso una caja llena de caca debajo de la cama, al otro día los reunió a los dos y les pregunto cómo les había ido con los regalos de navidad, a lo cual el pesimista  respondió:  a mí me regalaron un caballo muy costoso que no pienso ni tocar pues si me monto seguro me  puedo caer y morir o de pronto quedar discapacitado para siempre.  Así que no pienso ni  mirarlo. El optimista  por su parte respondió: -“a mí también me trajo el caballo más hermoso y costoso que he soñado jamás, pero cago  y se fue”-. 


Pensando en esta historia hoy se que el regalo no es malo, ni el caballo del cuento, ni la caja llena de caca, solo depende de la óptica con que el espectador lo mire. Como en el cuento,  lo que realmente importa es  -¿qué hacer con el regalo? 


La mierda, o el pensamiento acerca de la mierda,  más bien han estado muy mal manejados públicamente, digamos que ha tenido muy mal manejo de la prensa hablada y escrita. Ha sido injustamente juzgada!  Imagínate que nunca saliera de tu cuerpo,  por mierda que ella sea, siempre se sale si así no fuera  te intoxicas y mueres. O me intoxico y muero.  Por un momento quise ser la excepción, pero no existe tal, -es una verdad-  innegable.
En Colombia hay mil expresiones alusivas y en contra de  la mierda, parece cultural:  por ejemplo si te portas un poco truhan, te dicen: ”no sea mierda”.  Algunos por ejemplo si están enojados con el otro, le dicen:  “váyase pa’ la mierda”.  (La respuesta: “pero no tengo visa” como dice mi hermano Pascual).   Si alguien está hablando algo incomprensible se suele decir “de que mierdas está hablando” Aquí es en plural, debe ser más importante. En lenguaje callejero sino te acuerdas del nombre de algo dices “páseme la mierda esa” Si alguien está exhausto con algún problema o situación dice: “esto ya me sabe a mierda” como si la hubiera probado.  Y ahí es donde no me parece tan malo como quieren hacérnoslo ver. Piense un momento en esto, la palabra existe y es usada para cualquier cosa y de cualquier manera hasta el más refinado y educado usa esta palabra al menos una vez al día. Entonces en verdad esta palabra en realidad es un concepto y ha sido mal manejado.
Ahora supongamos que se pueda hacer dinero a partir de este concepto, supongamos que bien usada la información hablada y escrita o los medios de comunicación, con respecto a la caca, encontremos la manera de hacer dinero a partir de ella, supongamos que encontremos la manera de verla productiva más que destructiva, hay quienes le han dedicado un minuto, o más, a este punto en particular.


 Por ejemplo encontré en el Internet un video, primero muy gracioso segundo muy ilustrativo con lo que estoy hablando: estas son dos porristas Húngaras en un viaje que hicieron a  Nueva York se dieron cuenta que allí se vende cualquier cosa así que decidieron  recoger caca de perro en la calle, dejarla secar, pintarla de diferentes colorees, tal vez desodorizarla un poco y construir esculturas, artesanías, e incluso aretes artesanales que la gente compro en la calle desde  5 dólares en adelante. Sí es cierto que algunos dijeron que parecían bollos de caca, pero ellas les decoraron el concepto a lo cual los clientes creyeron, y compararon, compraron y pagaron. Y no es el único caso también encontré un video de un hombre que ha hecho mucho dinero pensando en la misma materia. Este  Ingles fabrica tazas de baño portátiles en cartón reciclado y además bolsas  biodegradables para que  la caca vuelva a quedar en la naturaleza y también te ofrece la posibilidad de “guardar” la caca que necesites con algún otro propósito para  más adelante. En que se inspiraron  este hombre y las porristas Húngaras para fundar una empresa especializada en baños portátiles y biodegradables? o artesanías y aretes para vender?  En que creen que estaban pensando cuando se les ilumino la idea? En CACA simplemente en CACA. 


Estos solo son dos pequeños ejemplos de lo que podemos hacer con las heces, para usar un término más elegante, sobrantes biodegradables del organismo viviente. Como queramos bautizarla, es verdad no puedo darles miles de ejemplos de cómo conseguir  dinero a partir de la caca como si podría hacerlo si me refiero a una barra de oro, pero la verdad es que si sabemos hacerlo  si pensamos en ello podemos sacarle  oro. Mirando el asunto con la óptica de la “utilidad” o con ojos “capitalistas” yo pienso, en verdad que no es tan malo recibir como regalo un camión lleno de “caca”  sobre todo si dejamos a un lado la parte negativa  y piensas en la oportunidad. 


Así que estoy muy agradecida con el regalo que mi padre nos dejo, mi hermano El optimista y adelantado Emeregildo, vendió la volqueta. Yo  les propongo queridos Eloísa, Eusebio, Conchita y demás,  vender la  mierda para hacer abono. Abono para plantas, Abono que regresará a la tierra de donde salió, Abono para producir plantas de productos de la huerta que después compraremos muy costosos en el supermercado. Vendamos la volqueta de mierda  para abono de nuevas ideas, para abono de  nuevas generaciones para abonar el amor con el cual ayudaremos a nuestros hijos o, sobrinos y nietos a crecer y a creer en la vida y en ellos mismos, nuevas generaciones plantadas y cuidadas con amor y sin odios. Vendamos la mierda para abonar el amor que se quebró el día que nos dejamos salpicar de rabia y odio y no entendimos que nos estaban salpicando de abundancia y oportunidades. Tal vez no la vendamos, usémosla para amasar crear y engrandecer el amor y las buenas relaciones con quienes amamos y nos rodean. La mierda misma puede producir dinero si la vemos con justos ojos. HOY RECIBIR MIERDA NO ME PREOCUPA. Pienso  que si es un obsequio debo hacer con este regalo lo mejor que pueda, y nunca defraudar a quien de buena gana y con su mejor intención y generosidad me lo dio. 




Patinaz